Descubren dos períodos en los que las corrientes se volvieron dramáticamente inestables
Los bivalvos, como las almejas, las ostras y los mejillones, registran en sus conchas los cambios ambientales estacionales, lo que los convierte en crónicas vivientes de la historia climática.
Un nuevo estudio de las conchas de los bivalvos ha detectado dos importantes episodios de inestabilidad en los sistemas de circulación del Océano Atlántico Norte, lo que sugiere que la región podría estar encaminándose hacia un punto de inflexión que podría desencadenar repentinos y dramáticos cambios en los patrones climáticos globales.















