Estaban hechos con conchas de cauri, un tipo de caracol marino y alimento favorito de los pulpos
Un estudio arqueológico ha determinado que los objetos de concha de cauri encontrados en las Islas Marianas eran señuelos utilizados para cazar pulpos y que los dispositivos, versiones similares de los cuales se han encontrado en islas del Pacífico, son los señuelos de su tipo más antiguos que se conocen en el mundo.